Supongo que, al leer el
título de mi artículo, estarán de acuerdo en aunar esfuerzos para luchar contra
los estúpidos y la estupidez en general. Porque miren, son una lacra cuya
densidad por metro cuadrado aumenta día a día y, lo que es más alarmante, con
una gran capacidad para tomar decisiones que nos afectan a todos.