De la palabra
“zarandaja”, dice la R.A.E. en su tercera acepción que es "cosa menuda, sin valor, o de importancia muy secundaria". Hay un mantra que se repite entre los medios de comunicación y personal de a
pie que consiste en decir que el Madrid no puede quejarse de los árbitros, que
en general los equipos grandes no deben quejarse de los árbitros.